Al igual que los Coupés y Cabriolets de la serie 2, el modelo BMW M2 tiene derecho a una actualización muy limitada, centrándose especialmente en los detalles. Esto no debería eliminar nada de su auténtico carácter deportivo, cada vez más raro en el mercado.

Si realmente existen grandes dificultades para descubrir las novedades estéticas en los nuevos Serie 2 Coupé y Cabriolet, la tarea puede parecer todavía más ardua en el BMW M2. La cuestión es sencilla, fuera de la firma luminosa diferente en los faros delanteros y traseros, concretamente los pilotos de retroceso que están situados más bajos, nada permite distinguir externamente el nuevo M2 del antiguo modelo.

Esto no es un mal en sí mismo, puesto que el Coupé conserva su silueta agresiva, pero sin perder nada de su elegancia, lo que es todo un encanto para los aficionados del motor.

El interior del BMW M2

En el interior, las novedades son menos raras, con una consola central y un cuadro de mandos ligeramente diseñados y la aparición de una pantalla táctil de 8,8 pulgadas. Los smartphones se pueden cargar a través de un sistema por inducción, situado en el reposabrazos central.

Propulsión, 6 cilindros y caja mecánica

Los amantes de la deportividad quedarán decepcionados seguramente al comprender que el M2 conserva el mismo valor de potencia y los mismos rendimientos, es decir 370 caballos y un paso de 0 a 100 km/hora en 4,3 segundos, por detrás del TT RS de Audi que alcanza la barrera de los 400 caballos y el paso de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos. En cualquier caso, nuevas versiones CS del coupé podrían ser desveladas en los próximos meses.

Además, a pesar de esta ausencia real de novedades, el BMW M2 sigue siendo una oferta única en el segmento de los pequeños Coupés. En efecto es el único modelo en ofrecer a la vez un motor de 6 cilindros y una caja mecánica.

Siendo seguro que el compacto BMW Serie 1 pasará a la tracción en la próxima generación, podemos preguntarnos si los futuros Coupés y Cabriolet Serie 2 conservarán la propulsión que tanto gusta a los clientes más deportivos de la marca. Al mismo tiempo, parece difícil imaginar un BMW M2 que ofrezca su potencia solamente en las ruedas delanteras.